Lo que pasa en Haití, aunque se respeta su condición de nación independiente, tiene que ser de interés para la República Dominicana.
La inviabilidad del Estado haitiano, en adición a la crisis del sistema electoral, la hambruna de su población que los empuja a migrar, el magnicidio del presidente Jovenel Moïse y la instauración de banda armadas controlando territorios, son parte de los problemas que inciden directa o indirectamente en este lado de la isla.
En otras palabras, tenemos hoy a un Haití, por encima del moño.
Eso debería obligarnos a reaccionar, pero ahora de forma rauda e inteligente.
Por primera vez, la situación nos fuerza a una cumbre ampliada.
Entendemos que el mejor escenario para una discusión seria, desde la perspectiva dominicana a presente y futuro, es el Consejo Económico y Social (CES) porque aglutina la mayor representación local.
De ahí debe salir la nueva política local estratégica para Haití.
COMENTARIOS (5)
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Excelente una redacción sin desperdicio y objetiva.
Ningún país puede cargar con la crisis haitiana, la nación debe buscar una vía más propicia, con todos los sectores del país. La solución de la nación está en la misma nación.
La República Dominicana ha hecho todo y más de lo que puede por Haití, si este país infiere en ese país aunque sea por su bien nos caerán encima los haitianos quienes nunca nos han visto como sus buenos vecinos y encima de su desorden y su crisis salen a emitir juicios de un país como este que es el que más ha visto por ello, pero también a esto hay que sumarle a la comunidad internacional que se la pasan hablando y no hacen nada y que junto a ese país en muchas ocasiones nos ha avisado de malos vecinos.
Este país tiene muchos problemas a los que debe de buscar soluciones y que también necesita ser ayudado, tenemos que ponerle ya un alto a Haití o nos perderemos nosotros.
El interés para Repúblia Dominicana en que Haiti sea estable, es como cuando queremos que el vecino cosiga lo suyo, o que el hijo pueda costear sus necesidades; ya sabemos que, si no nos van a aportar al menos no tenemos que darle.
A nadie le debe dudas de que, el impaz del hermano país es un problema para la tiera de Los Trinitarios, aunque los haitianos han vivido acompejados e irritables a cada expresion e iniciativa que nazca en la parte Este de la isla, lo cierto es que la influenia de dominiana en Haiti debe ser una realidad, púes es quien sufre las conseuenias de cualquier desgraia de aquella desbenturada república.
Dominicana solo se ha preoupado por que le vean como bondadosa ante Haiti, y es verdad que asi es, mientras ellos con su dipomacia que al parecer supera la nuestra, viven su papel de victimas y siempre consiguen sus objetivos.
Hoy estamos cruzando los dedos para que la cosa no se empeore, algo que parece imposibole detener antes de hacer explosion, las autoridades estan nerviosas esperandon que aquello por alte de magia sera resuelto para que no se diga que la tierra de Juan Pablo Duarte ofendio o se defendio de los pobres hantianos.
Siempre a la defensiva y sin un plan para el problema que estamos seguros que un dia estallará, al final terminaremos cargando con almenos el peso soioeonomio de su falta de juiio.
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