Redacción.- David Ortiz está a poco menos de dos semanas de colocar su nombre junto al de un selecto grupo de peloteros que han llegado a la inmortalidad por sus ejemplares carreras en el béisbol de Grandes Ligas. Como todo en la vida, a pesar de que ese será el momento más alto como profesional para el “Big Papi”, las cosas no suelen ser tan simples.
El exbateador designado de Boston Red Sox habló de todos los preparativos con los que ha tenido que lidiar en las últimas semanas. Desde la preparación de la celebración de su entrada a Cooperstown, hasta el discurso que dará cuando su nombre sea llamado, Ortiz está trabajando a toda máquina, quizás hasta más que en sus días de pelotero activo.
“Quisiera que acabe pronto. Estoy nervioso por todo. Es demasiado. Son demasiadas cosas al mismo tiempo”, dijo el exjugador a la prensa.
“Nunca había tenido tantas cosas en mi agenda. Soy alguien que sabe que lidiar con muchas cosas, pero son demasiadas”, añadió.
Con respecto a su discurso, Ortiz dijo que marcha lentamente en la redacción del mismo para la ceremonia de exhaltación, pero que la idea principal será enfocarse en agradecerle a todo aquel que le ayudó a lo largo de su carrera.
“No tengo nada loco para mi discurso. No me va tomar tres horas”, dijo.
Adicionalmente, David Ortiz ha estado trabajando en la realización de un festival dominicano, el cual se celebrará cerca de Cooperstown, por lo que es evidente a qué se refiere cuando dice que nunca había tenido tantas cosas al mismo tiempo en su agenda.
Considerado como uno de los mejores bateadores designados de la historia, ganó tres Series Mundiales, tuvo 10 invitaciones al Juego de Estrellas y siete premios Bate de Plata en su carrera. Culminó su paso de 20 años por Grandes Ligas con un promedio de bateo de .286, junto a un OPS de .931, 2,472 hits de los cuales 541 fueron cuadrangulares y 632 fueron dobles, 1,768 remolcadas, mientras que anotó en 1,419 ocasiones.
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