Moscú, Rusia.- El jefe de la agencia de inteligencia militar rusa a la que Occidente ha responsabilizado de una serie de ataques recientes murió el miércoles después de "una grave y prolongada enfermedad", dijo el jueves el Ministerio de Defensa ruso, calificándolo de "verdadero hijo de Rusia".
El Ministerio de Defensa elogió al coronel general Igor Korobov, de 62 años, quien había dirigido la agencia de espionaje, más conocida como GRU, desde 2016, diciendo que había sido nombrado Héroe de Rusia por su servicio en el cargo, el máximo reconocimiento del Estado.
"El afectuoso recuerdo de esta maravillosa persona, un verdadero hijo de Rusia, un patriota de la Patria, coronel general Igor Valentinovich Korobov, siempre estará en nuestros corazones", dijo el ministerio en un comunicado.
El ministro de Defensa, Sergei Shoigu, cercano al presidente Vladimir Putin, expresó sus condolencias a la familia de Korobov, mientras que la agencia estatal de noticias TASS citó a una fuente militar diciendo que el vicealmirante Igor Kostyukov, número dos de la agencia, había acompañado a Korobov durante su enfermedad y era el favorito para asumir formalmente su cargo.
Reino Unido ha acusado al GRU de intentar envenenar al exespía ruso Sergei Skripal y su hija con un agente nervioso, los Países Bajos lo han acusado de intentar piratear al organismo mundial de armas químicas, y agencias de inteligencia estadounidenses dicen que trató de interferir en las elecciones presidenciales de 2016.
Rusia niega todas esas acusaciones.
Las especulaciones sobre la suerte de Korobov habían ido en aumento tras publicarse que Putin lo había convocado tras el caso Skripal y criticado duramente la operación, que no acabó con la vida de los Skripals y convirtió al GRU en objeto de burla en medios occidentales.
Korobov estuvo ausente de una ceremonia en Moscú este mes, en la que Putin y otros altos cargos celebraron el centenario del GRU, y el líder ruso elogió su capacidad y sus "habilidades únicas".
La muerte de Korobov despeja el camino para que Putin designe a un sucesor para encabezar una agencia que, según expertos de inteligencia, ha intensificado sus misiones secretas con el incremento de la tensión entre Rusia y Occidente.
Korobov era un veterano militar soviético que sirvió en la fuerza aérea y, según su biografía oficial, empezó a trabajar para el GRU en 1985.
El GRU, fundado como la dirección de registro en 1918 después de la revolución bolchevique, es una de las tres principales agencias de inteligencia de Rusia, junto con el Servicio de Seguridad Federal y el Servicio de Inteligencia Exterior SVR.
El último jefe del GRU, Igor Sergun, también murió a una edad relativamente joven. Tenía solo 58 años cuando el Kremlin dijo en 2016 que había muerto inesperadamente.