Redacción.- Angelina Jolie no está atravesando uno de sus mejores momentos. El divorcio está resultando más difícil de lo que podía imaginarse en un principio y la guerra en los tribunales es cada vez más dura.
Una época tormentosa, sin duda, aunque la incesante lluvia cesa de vez en cuando y Angelina puede tomar un respiro, como el pasado sábado 18 de agosto.
La actriz se llevó a algunos de sus hijos, Shiloh, Zahara, Knox y Vivienne, al cine.
Fueron a ver el último estreno de Disney 'Christopher Robin'. Y aunque hasta ahora estas imágenes eran típicas solo de Angelina, es probable que pronto veamos la misma estampa pero con Brad Pitt, pues ha conseguido ganar a Angelina en los tribunales y el juez ha dictaminado que tiene que ver a sus hijos más a menudo.
A partir de ahora, Brad tendrá estar con sus hijos cuatro horas cada dos días lectivos, o sea, un día sí y otro no, y doce horas cada dos días festivos. Una norma que si Angelina no cumple podría ponerle en una tesitura complicada, ya que cabría la posibilidad de que perdiera la custodia.
Por su parte, Angelina ha empezado otra guerra judicial, y ha demandado a Pitt por no pagar la manuntención de sus hijos (Maddox, de 17 años, Pax, de 14, Zahara, de 13, Shiloh, de 12 y Vivienne y Knox, de 10).
En ella exigía el pago de la mitad de los gastos y una compensación.
Esta demanda que ha dejado al descubierto los gastos que debe cubrir la pareja.
Desde los 125 mil euros al año de cada niñera (tienen dos), 88 mil en tutores aproximadamente, pues el precio varía según el área en el que estén especializados, hasta el millón 300 mil euros en guardaespaldas. Sin contar los viajes que hacen todos, las estancias, etc. O sea, una suma que asciende a más de un millón y medio de euros.
Pitt alegó que desde que se han divorciado se ha gastado más de 1 millón cien mil euros en sus hijos, además de los 7 millones que le ha prestado a Angelina para comprarse la nueva casa en la que ahora reside.
Además de acusar a Jolie de "manipular a los medios de comunicación".
Por su parte, la abogada de Angelina, Samantha Bley DeJean, declaró que "un préstamo no es, de ninguna manera, manutención. Y el presentarlo como si lo fuera lleva a equívoco y es erróneo", además de afirmar que su cliente pagará la deuda y que su demanda es "legalmente apropiada y objetivamente precisa en todos los aspectos".
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