Redacción (EFE).- Diego Simeone llegó el 23 de diciembre de 2011 al Atlético de Madrid para dejar su sello: una década después, se convirtió en el entrenador más ganador de su historia con ocho títulos.
El 22 de mayo de 2021 consiguió su segunda liga al frente del banquillo rojiblanco, después de la lograda en 2013-14, que se suma a la Copa del Rey de 2012-13, a la Supercopa de España de 2014, a las dos UEFA Europa League de 2011-12 y 2017-18 y a las dos Supercopas de Europa de 2012 y 2018, contra Chelsea y Real Madrid, respectivamente.
Diego Simeone llegó el 23 de diciembre de 2011 al Atlético de Madrid para dejar su sello: una década después, se convirtió en el entrenador más ganador de su historia con ocho títulos.
El 22 de mayo de 2021 consiguió su segunda liga al frente del banquillo rojiblanco, después de la lograda en 2013-14, que se suma a la Copa del Rey de 2012-13, a la Supercopa de España de 2014, a las dos UEFA Europa League de 2011-12 y 2017-18 y a las dos Supercopas de Europa de 2012 y 2018, contra Chelsea y Real Madrid, respectivamente.
Hasta el momento, nadie ha ganado más títulos que él como entrenador del Atlético. Ni nadie ha ganado más partidos que él. Ni siquiera Luis Aragonés, un mito, uno de los futbolistas y técnicos más grandes de los 118 años de existencia del club, una leyenda formidable, a la que ha superado Simeone como DT.
La Liga 2020/21 agranda su recorrido, ya de por sí gigantesco en el Atlético, al que posicionó de nuevo entre los grandes, a la altura de su historia, en el sitio que le pertenece, pero del que se olvidó durante la primera década del siglo XXI o durante los últimos años de los 90, cuando fue relegado a Segunda.
En cuatro meses y medio ya había ganado su primer título con el Atlético: la UEFA Europa League. El 9 de mayo de 2012, en el estadio Nacional de Bucarest, venció en la final por 3-0 al Athletic Club, con un Radamel Falcao estelar. El atacante colombiano decidió la final con dos goles decisivos de un triunfo culminado por Diego Ribas.
El segundo data del 31 de agosto de 2012: la Supercopa de Europa, en el estadio Luis II de Mónaco. De nuevo con un formidable e incontestable Falcao superó de forma magnífica al Chelsea, con un encuentro imponente de todo el equipo, pero especialmente del goleador, imborrable en el club madrileño.
El Atlético se impuso por 4-1. El primer tiempo ya ganaba por 3-0, con un 'triplete' del '9' colombiano. El brasileño Joao Miranda anotó el cuarto en el segundo tiempo, mientras que Gary Cahill logró el tanto de un Chelsea desbordado prácticamente de principio a fin.
El salto del Atlético, en cualquier caso, lo promovió el tercer título, al año siguiente, cuando el equipo se sintió ya capaz de cualquier desafío, de ganar a cualquiera en cualquier escenario: la Copa del Rey del 17 de mayo de 2013 en el estadio Santiago Bernabéu.
Frente al Real Madrid, en la prórroga, el grupo dirigido por Simeone se impuso por 2-1. El gol definitivo fue de Miranda, que cabeceó un centro de Koke Resurrección, después del empate a uno con el que habían terminado los 90 minutos reglamentarios de resistencia rojiblanca, en los que igualó por medio de un gol de Diego Costa.
El más grande, aun así, fue culminado justo un año después, el 17 de mayo de 2014, con un empate a uno en el Camp Nou con el cabezazo para la historia de Diego Godín en la última jornada: la Liga 2013-14. Anhelada desde hacía 18 años antes, la temporada fue memorable, con el Atlético vencedor del duelo que sostuvo durante todo el torneo con el Real Madrid y el Barcelona. Sumó 90 puntos.
Siguió luego la Supercopa de España ante el Real Madrid, en 2014, con un 1-1 en el Santiago Bernabéu y un 1-0 en el Vicente Calderón, transformado por Mario Mandzukic nada mas comenzar el encuentro a pase de Antoine Griezmann, y después cuatro años de sequía, hasta la UEFA Europa League del 16 de mayo de 2018 en Lyon frente al Olympique Marsella, con dos goles de Antoine Griezmann y uno de Gabi Fernández, y la Supercopa de Europa frente al Real Madrid del 15 de agosto de 2018 en la prórroga, con dos tantos de Diego Costa, una de Saúl Ñíguez y una de Koke Resurrección.
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