Vientos tumban árboles y plásticos de invernaderos en San José de Ocoa; en María Trinidad Sánchez dañan viviendas y fuerte oleaje
San José de Ocoa.- Varios árboles derribados, rotura de plásticos de invernaderos, interrupción de la energía eléctrica y lluvias, son hasta el momento los efectos provocados por la tormenta tropical Isaías en la provincia San José de Ocoa.
El director provincial de la Defensa Civil, Radhamés Antuna, informó este jueves que varios alcaldes le comunicaron la caída de árboles en distintos lugares de esta demarcación.
En el distrito municipal La Ciénaga, un árbol cayó encima del techo de una vivienda, en el también distrito municipal El Naranjal, otro que fue derribado por los fuertes vientos, obstruyó la vía principal.
Antuna indicó que en la sección Los Ranchitos, distante a 16 kilómetros de Ocoa, otro arbusto se fue al suelo.
Mientras que en Tachuela y otras zonas del distrito municipal El Pinar, las fuertes ráfagas de viento dañaron plásticos de invernaderos.
La información la ofreció vía telefónica el productor de aguacates Raúl Gerónimo.
"Mira aquí en Tachuela, en mis invernaderos, también me dicen que en los de Juan Aníbal, Ambioris Rossis y otros, los plásticos resultaron dañados y eso que no ha llegado la tormenta", aseguró Gerónimo.
En San José de Ocoa sigue lloviendo fuertemente mientras los organismos de socorro se mantienen en alerta ante cualquier eventualidad que se registre por el fenómeno atmosférico.
Anoche como consecuencia de los vientos, fue afectada la energía eléctrica en varias ocasiones.
Techo de una vivienda destrozado por los vientos.
María Trinidad Sánchez: árboles derribados, viviendas afectadas y fuerte oleaje
También fuertes vientos se registran en la provincia María Trinidad Sánchez, dónde un árbol cayó encima de una casa en Río San Juan y ocasionó daños materiales a la vivienda sin que se registren heridos.
La directora provincial de la Defensa Civil, Minerva Santos, informó que también en la comunidad La Cruz, en el municipio de Nagua, debido a los fuertes vientos, el techo de zinc de una vivienda fue arrastrado por el viento.
Explicó que el oleaje se incrementó de manera considerable, por lo que los albergues se preparan para recibir a las personas que residen en zonas de riesgo.