Consumo excesivo del alcohol altera sistema del corazón y causa otros trastornos

Santo Domingo.- El Síndrome de Corazón Festivo es un trastorno patológico causado por la excesiva ingesta de alcohol, que genera alteración de la función del sistema eléctrico del corazón causando arritmias cardiacas como fibrilación y flutter auricular.

La afirmación la hizo Luisa de la Rosa, especialista en cardiología de Hospiten Santo Domingo, quien asegura que aunque su fisiopatología “no está del todo claro, podría asociarse a la liberación de hormonas como la noradrenalina y adrenalina.

De la Rosa explicó que esa patología no es específica para ningún sexo, pero sí es más frecuente en hombres que en mujeres y en paciente jóvenes mayores de 30 años, por lo regular personas sin antecedentes de enfermedad cardiaca o arritmias.

Agregó que esa patología se relaciona con los aldehídos durante el metabolismo en el hígado, cuyos síntomas principales son palpitaciones súbitas, debilidad general, mareos, dolor torácico y ocasionalmente pérdida del conocimiento.

“Por eso, para esta época del año de festividad de la navidad y año nuevo, así como en periodos de vacaciones, lo recomendable en consumo de alcohol es dos tragos por día para hombres y uno para mujeres, evitando el consumo excesivo”, precisó la doctora De la Rosa.

La profesional de la salud adviertió que las arritmias son benignas en sentido general y no degeneran en complicaciones a largo plazo, “pero a pacientes con enfermedades cardiovasculares los podría descompensar.

“Es que, aparte de dañar el sistema eléctrico del corazón, el alcohol también podría afectar la parte muscular del corazón causando miocarditis y miocardiopatías por alcohol; afectar el hígado, el sistema nervioso central, y el sistema digestivo, causando gastritis, y daños a los riñones”, explicó De la Rosa.

El Síndrome de Corazón Festivo es un trastorno que se puede identificar por la historia clínica del paciente, “si este tiene una historia de ingesta de alcohol antes de iniciar la arritmia, o si es un paciente sin antecedentes de enfermedad cardiovascular”.

Entre las recomendaciones, de la Rosa, citó no consumir alcohol en exceso, mantener buena hidratación antes, durante y después del consumo de alcohol, y en caso de presentarse palpitaciones o algunos de los síntomas señalados al ingerir alcohol, ir a emergencia para un electrocardiograma y diagnosticar o descartar el tipo de arritmia, y medicar si es necesario.

Recomienda, además, luego que pase el proceso de la arritmia ya con ritmo cardiaco normal, evitar consumir alcohol ni realizar actividades físicas que puedan estimular nuevamente la liberación de sustancias con adrenalina y noradrenalina en las siguientes 48 horas.

De la Rosa indicó que por lo regular una arritmia desaparece en las primeras 24 horas, pero si el paciente tiene frecuencia cardíaca muy elevada, “debemos hidratar el paciente y medicar con antiarrítmicos o medicamentos betabloqueantes”.

“Pero en caso de que la arritmia no desaparezca en las primeras 24 horas a pesar de la medicación inicial o si el paciente presenta inestabilidad hemodinámica debemos realizar una cardioversión eléctrica para recuperarlo”, manifestó.