El valor de la educación

La educación es la diferencia entre los países. Esa es la verdadera fuente de riqueza y superación.

Es por eso que el valor de la buena formación es transversal a todas las actividades humanas.

Ese significado debe implicar un compromiso del liderazgo político, empresarial y social.

Y en el caso de los profesores con vocación incuestionable la responsabilidad adquiere una implicación sagrada.

Boicotear volver a las escuelas es imperdonable desde cualquier sector desde donde se pida.

Y hay una responsabilidad de las familias para asegurar que sus hijos y sus nietos puedan recibir una buena educación para poder salir a camino.

No hacerlo es condenarse a ser parte de los sectores menos favorecidos. Y sin aspiración de superación no se logra avanzar.

Procuremos que nuestros estudiantes de las escuelas públicas estén en las aulas, como en los colegios.

Hacerlo es promover justicia social.