Esperar el colapso

La irresponsabilidad de los partidos políticos y sus principales dirigentes ha quedado históricamente registrada.

Han preferido esperar el colapso que adoptar medidas de saneamientos y castigos a las inconductas de sus militantes, quienes al llegar al poder se convierten en funcionarios.

Incluso, algunos clasifican la gravedad de las faltas.

Por lo regular se hacen de la vista gordo con la práctica de la corrupción de los fondos públicos, pero creen gravoso vincularse al narcotráfico y a otros ilícitos.

Esa dinámica ha debilitado el sentido del límite igual de muchos sectores sociales que en cada ocasión ven una oportunidad de incurrir en malas prácticas, sin temor a las consecuencias legales o éticas.