Las desigualdades

Un mundo igualitario podría ser más una utopía que una realidad. Las personas tienen actitudes y deseos diferentes y ambiciones igualmente diferenciadas.

Pero es posible un mundo más justo y razonable.

Cuando las desigualdades tocan lo esencial, no sólo se producen las diferencias de clases, igual son generadoras de sentimientos negativos y resentimientos.

República Dominicana es un país que ha tenido un crecimiento consistente en su economía, pero ha generado también una profunda diferencia en las clases sociales.

Es obvio que esa situación nos produce muchos problemas.

La pandemia nos ha visibilizado muchas de esas dificultades y creemos que es momento que prestemos seriamente atención a esa cuestión.