Redacción.- Al menos cinco personas murieron y otras 17 resultaron heridas este lunes en Viena, la capital de Austria, durante un ataque armado ejecutada por hombres que portaban armas largas.
El canciller austriaco, Sebastian Kurz, consideró la acción ocurrida en seis puntos diferentes de la ciudad como un "repulsivo ataque terrorista".
El ataque comenzó alrededor de las 20:00 (19:00 GMT) del lunes, cerca de la sinagoga Seitenstettengasse, cuando al menos un hombre fuertemente armado abrió fuego contra varias personas que se encontraban en cafés y restaurantes, horas antes de la aplicación de las nuevas restricciones por coronavirus.
Murieron cuatro civiles y uno de los pistoleros, que fue asesinado a tiros por la policía poco después de que comenzara el ataque. El ministro del Interior, Karl Nehammer, lo describió como un simpatizante del autodenominado grupo Estado Islámico.
La policía ha comenzado una búsqueda másiva de otro hombre que cree que estuvo involucrado en el ataque.
La primera de las tres víctimas murió en el lugar del ataque, mientras que la segunda -una mujer- falleció posteriormente en el hospital, según informó el alcalde de la ciudad, Michael Ludwig.
De los 17 heridos que fueron trasladados a centros de salud, al menos siete se encontraban en condición crítica.
El agresor abatido por los agentes llevaba un chaleco explosivo que resultó ser falso y portaba "un rifle de asalto y otras armas", según fuentes policiales.
Las autoridades pidieron a los residentes que eviten reunirse en espacios públicos y usar el transporte.
Pese a que uno de los puntos del atentado fue en una calle cercana a una sinagoga, el líder de la comunidad judía de Austria, Oskar Deutsch, dijo que no estaba claro si el centro religioso era un objetivo del ataque.
Un agente que custodiaba la sinagoga se encuentra entre los heridos.
El ataque ocurrió apenas unas horas antes de que Austria impusiera sus nuevas restricciones nacionales para frenar el avance del coronavirus.
Chris Zhao estaba en un restaurante cercano cuando comenzó el tiroteo.
"Escuchamos ruidos que sonaban como petardos. Oímos entre 20 y 30 y entonces pensamos que en realidad eran disparos. Vimos las ambulancias ... haciendo fila. Había víctimas. Tristemente, vimos un cadáver en el suelo", relató a la BBC.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, calificó el atentado como un acto cobarde que viola la vida y los valores humanos.
Austria no se había visto afectada hasta ahora por este tipo de ataques, que han afectado recientemente a otros países europeos, como Francia o Alemania. Los líderes de toda la región condenaron el tiroteo y el presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que Europa no debe "darse por vencida" ante los ataques.