Santo Domingo.- El Tribunal Superior Electoral (TSE) aplazó para este martes en la tarde el conocimiento de una acción de amparo en contra del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que persigue el cumplimiento de la sentencia y salvaguarda de derecho de tutela judicial efectiva.
La lectura está programada para las 5:00 de la tarde.
El alto tribunal decidió retirarse a deliberar tras escuchar las partes que expusieron sus argumentos durante la audiencia en la que los dirigentes, Aurelio Moreta Valenzuela, Andrés Henríquez, César Emilio Guzmán Antigua y Aníbal García Duvergé, sometieron en contra de Miguel Vargas Maldonado y la dirección del PRD.
Los accionantes están representados por los abogados Guido Gómez Mazara, Domingo Rojas Pereyra y José Luis Hernández Cedeño, mientras que al PRD lo representan los abogados Eduardo Jorge Prats y Ramón Vásquez.
En la instancia, los accionantes piden al TSE amparar sus derechos y ordenar que se cumplan con lo establecido con la sentencia TSE 002-2018 de ese alto tribunal que ordenó la anulación de la convención, así como que continué con el proceso próxima asamblea interna.
El tribunal, presidido por Román Jáquez, adoptó la decisión de anular la convención de esa organización celebrada el 3 de diciembre de 2017, al tiempo que ordenó la celebración de un nuevo proceso interno del Partido de Revolucionario Dominicano (PRD) en un plazo que no puede exceder los 60 días.
Igualmente ese tribunal dispuso la reintegración de Guido Gómez Mazara al PRD, tras ponderar que se le violaron el procedimiento disciplinario de ese partido y el derecho al debido proceso.
A su salida de la audiencia, Gómez Mazara manifestó que resulta improcedente que a 60 días de haber evacuado el Tribunal Superior Electoral la decisión, el PRD no haya convocado los organismos y mucho menos haya elegido la comisión organizadora de la convención lo que a su juicio es algo violatorio a la sentencia y a los estatutos del partido.
Indicó que ha llegado el momento de reivindicar en el partido la democracia interna y la participación, y sobre todo el respeto entre los militantes, al margen de la discrepancia.
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