Nueva Jersey.- El pasado miércoles, Koeberle Bull, de Lumberton, Nueva Jersey, se despertó con un mensaje racista en Facebook enviado por un hombre de Kentucky. “Fue realmente vulgar: llamó a mis niños la palabra prohibida y les deseo cosas terribles”, explica Bull a Yahoo Lifestyle.
A la madre de tres niños mestizos, de 16, 11 y 8 años respectivamente, le preocupó especialmente la foto de perfil del hombre, en la cual aparecía con un arma, por lo que tuvo una “corazonada”, llamó a la comisaría local de policía e informó de ello. “Pero sentí que realmente no serviría de nada, así que publiqué una captura de pantalla del mensaje de Facebook”, dice.
El hombre ha bloqueado a Bull. Sin embargo, sus amigos buscaron detalles sobre su identidad, y Bull pronto tuvo la suficiente información como para compartirla con la policía de Lawrenceburg, Kentucky. “Hablé con el agente Josh Satterly, quien me dijo: ‘En mi mundo no hay cabida para este tipo de odio’”, explica. “Me tomó en serio”.
Las policías local y del estado siguieron la recomendación de la madre y, el jueves, unos agentes fueron a la casa de un hombre de 20 años llamado Dylan Jarrell, justo cuando él estaba saliendo de su casa con más de 200 balas, un chaleco antibalas, un arma de fuego, un tambor con capacidad para 100 balas y un “detallado plan de ataque”. Se dirigía hacia dos distritos escolares en el condado de Anderson y el condado de Shelby, según dijo la Policía del Estado de Kentuckyen una conferencia de prensa ofrecida el viernes.
“No me cabe la menor duda de que como resultado de esta investigación, hemos salvado vidas”, eso dijo el comisionado de la policía de Kentucky, Rick Sanders, durante la conferencia de prensa. “Ese joven tenía pensado ir a las escuelas y sembrar el caos”.
“Tenía las herramientas necesarias, la intención necesaria. Y lo único que se interpuso entre él y el mal… son las fuerzas de seguridad”, agregó.
Cuando la policía registró la casa de Jarrell, encontró un historial de búsqueda en Internet sobre “Cómo llevar a cabo un tiroteo en una escuela” y una “amenaza plausible e inminente en escuelas de los condados de Shelby y Anderson”, de acuerdo al comunicado de prensa. La policía también ha revelado que en mayo, Jarrell había sido indagado por el FBI en relación a amenazas vertidas en las redes sociales contra una escuela de Tennessee.
Jarrell fue acusado de dos cargos por amenaza terrorista en segundo grado y un cargo por comunicaciones hostigadoras, y se encuentra detenido en el Centro de Detención del condado de Shelby.
Sheila Mitchell, de Escuelas Públicas del condado de Anderson, ha explicado a Yahoo Lifestyle que se suspendieron las clases el viernes debido a la preocupación por la seguridad de los estudiantes. “La felicito [a Bull] por su coraje y su determinación para insistir en la amenaza y por colaborar con las autoridades locales y estatales. Estamos muy agradecidos”. En agradecimiento, Bull ha recibido invitaciones para visitar a familias de todo el país y dice que el momento de la detención tuvo que ver con la “intervención divina”.
En agradecimiento, Bull ha recibido invitaciones para visitar a familias de todo el país y dice que el momento de la detención tuvo que ver con la “intervención divina”.
Ella anima a la gente a informar sobre mensajes preocupantes en las redes sociales. “Esa llamada entre un millón podría evitar una tragedia”, explica Bull a Yahoo Lifestyle. “Doy las gracias porque todo el mundo está bien”.
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