Hong Kong.- Empujados por el pánico a la propagación del coronavirus por el continente asiático, los ciudadanos de Hong Kong han vaciado los estantes de los principales supermercados de la ciudad, haciendo provisión de carne, arroz, productos de limpieza y jabón.
La urgencia por hacerse con alimentos en la ciudad de 7,4 millones de habitantes no tiene precedentes, según cuentan los hongkoneses, que describen la situación como mucho peor que la desatada durante el brote del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, por sus siglas en inglés) de 2003, que mató a casi 800 personas en todo el mundo, incluidas casi 300 en Hong Kong.
El nuevo coronavirus se originó en la provincia de Hubei, en el centro de China, y hasta ahora se ha cobrado 361 víctimas mortales en el país.
Durante el fin de semana cientos de personas hicieron cola durante horas en Hong Kong para comprar máscaras y productos de refuerzo inmunológico como la vitamina C.
En un importante supermercado del bullicioso distrito de Wan Chai, los mostradores de carne y mariscos refrigerados aparecían vacíos a media mañana del viernes y durante el fin de semana, mientras que las existencias de verduras frescas disminuyeron.
"Todo el mundo está realmente preocupado. Creo que todos tienen miedo de lo que va a pasar en los próximos días. Los precios también van a subir", dijo Cindy, una ejecutiva de ventas al por menor que estaba comprando alimentos secos y jabón.
Decenas de compradores protegidos con mascarillas empujaban carritos por pasillos vacíos, agotadas las existencias de productos para el lavado de manos y líquidos antisépticos. Otros trataban de abastecerse de las bolsas de arroz y fideos empaquetados que quedaban.
La prisa por comprar alimentos y productos de limpieza responde a la preocupación de algunos compradores ante un posible cierre de la frontera que afecte al suministro de productos.
Alrededor del 90 por ciento del suministro total de alimentos de la ciudad es importado, proveniendo el grueso del continente, según datos oficiales.
El Gobierno de Hong Kong ya ha cerrado algunos cruces fronterizos, incluyendo los del ferrocarril de alta velocidad, pero ha evitado un cierre total a pesar de los crecientes llamamientos de los profesionales sanitarios, que proyectan acudir a la huelga el lunes para exigir medidas.
El gobierno está tratando de encontrar el modo de controlar la propagación de las infecciones a nivel local, con 15 casos confirmados en la ciudad. Han aumentado los llamamientos para que el Gobierno cierre la frontera con la China continental para minimizar el riesgo de infección.
La economía de Hong Kong se vio muy afectada durante la epidemia del SARS, siendo los sectores del turismo y los servicios los más perjudicados, ya que la llegada de visitantes se desplomó y el desempleo se disparó.
También se produjo una fuerte caída en el gasto de los consumidores durante el segundo trimestre de 2003 debido al SARS, pero el repunte del resto del año hizo que las ventas al por menor cayeran sólo un 0,6% en el año.
(Información adicional de Jessie Pang y Scott Murdoch; Escrito por Farah Master; Editado por Raju Gopalakrishnan; Traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)
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