Bruselas.- El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, acusó este martes a Rusia de afirmar "falsamente” que Ucrania prepara una “bomba sucia" en su propio territorio.
Stoltenberg ha recordado que- como ya ocurriera con Siria- “Rusia ahora afirma falsamente que Ucrania se está preparando para usar una ‘bomba sucia’ radiológica en su propio territorio. Los aliados de la OTAN rechazan esta acusación transparentemente falsa".
En un discurso en el portaaviones estadounidense George H. W. Bush, que participa actualmente en el ejercicio aliado “Neptune Strike” en el mar Mediterráneo, el secretario general de la Alianza Atlántica ha denunciado que «Rusia a menudo acusa a los demás de lo que pretenden hacer ellos mismos» y en este sentido ha recordado que se trata de un «patrón» de comportamiento que la OTAN ya ha observado en otras ocasiones, como en el conflicto sirio.
Rusia lleva su acusación ante la ONU
Pero el Gobierno ruso insiste y ha llevado su acusación ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
La delegación rusa hizo una presentación ayer sobre el asunto durante una reunión a puerta cerrada, para poder distribuir ciertos detalles que no quería que se hiciesen públicos, según explicó al término de la cita su embajador adjunto, Dmitry Polyanskiy.
El diplomático dijo que el objetivo de la cita, era trasladar a los miembros del Consejo de Seguridad los informes de inteligencia que apuntarían a que Kiev está preparando una «bomba sucia», un artefacto explosivo que, una vez detonado, disemina elementos radiactivos en la atmósfera y en la superficie del terreno, con la consiguiente contaminación.
Pero James Kariuki, el embajador adjunto británico, aseguró a los periodistas, al término de la sesión, que Moscú no ofreció ninguna prueba concluyente y que todo es parte de una campaña de «desinformación”.
Preguntado por la misión que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha decidido enviar a Ucrania tras las denuncias rusas, el representante de Moscú puso en duda que la misión consiga recabar información sobre los supuestos preparativos ucranianos, unos preparativos que Kiev ha negado repetidamente y que, de hecho, han motivado la solicitud de la visita de esos expertos del OIEA para despejar cualquier duda.
Dos muertos y tres heridos en un nuevo bombardeo ruso
Sobre el terreno, los combates continúan. Dos personas han muerto, una de ellas una mujer embarazada, y otras tres han resultado heridas en el bombardeo ruso de una gasolinera ocurrido esta noche en Dnipró, ciudad del sudeste de Ucrania.
El alcalde de Dnipró, Borys Filatov, ha publicado en Telegram que la mujer embarazada murió en el interior de un vehículo mientras que el otro fallecido era el operario de una estación de lavado de automóviles.
Según las autoridades locales y militares de la región, el bombardeo ocasionó el incendio de la gasolinera y el fuego se extendió en un área de 300 metros cuadrados.
También el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se hacía eco del ataque en su cuenta de Facebook, donde ha advertido de que “nunca perdonaremos. Las represalias serán justas e inevitables”.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en una comparencia ante la prensa el martes en Kiev. EFE/EPA/Sergey Dolzhenko.
En el sur, en la la región de Zaporiyia, los prorrusos han denunciado que un gran número de unidades ucranianas se están reagrupado con vistas a una posible ofensiva.
El político Vladímir Rógov, líder del movimiento «Juntos con Rusia», ha asegurado que hay duelos de artillería y que el mando ucraniano ha traslado tropas desde los frentes de Járkov y Dniepropetrovsk, no solo a la región de Jersón, fronteriza con la península de Crimea, sino también a la de Zaporiyia.
Efectivos de la Guardia Nacional de Ucrania trasladan un mortero en un lugar no revelado en la región de Járkov, en el noreste de Ucrania. EFE/EPA/Sergiy Kozlov.
Según Rógov, Ucrania acumula efectivos junto a las localidades de Orihiv y Guliapole con el propósito de atacar las localidades de Vasilivka y Polohi controladas por Ejército ruso.
Vasilivka se encuentra a unos 30 kilómetros al sur de la ciudad de Zaporiyia, la capital regional, y Polohi, a unos 70 kilómetros al sureste.