Se están produciendo alzas en los precios de los alimentos, en las materias primas y en los materiales de construcción.
La primera conclusión a la que debemos llegar es que son los efectos de la pandemia del COVID-19.
Donde primero sentimos esa realidad fue en los materiales y los equipos médicos para atender las urgencias sanitarias.
Es una situación delicada, porque muchos de los factores no están en nuestras manos para resolverlos.
Quizás nuestra principal, o única opción, es aminorar los efectos de esta situación internacional.
Creemos que convendría una mesa de trabajo del Gobierno y los empresarios para procurar decisiones razonables dentro de esta realidad.
Incluso, el CES podría ser muy útil.