Los gobiernos cada vez que la delincuencia cobra fuerza y atormenta a la población pretenden manipular a la opinión pública presentando estadísticas de disminución de los actos ilícitos.
De esa manera uno tras otro ha dejado que las causas y los delincuentes se multipliquen.
Así el problema parece aceptarse como algo que no tiene más que paliativos para aliviar las preocupaciones y no una solución profunda y definitiva.
El Gobierno está recurriendo a este mismo mecanismo gastado pretendiendo hacer creer que la delincuencia ha disminuido.
Es una ingenuidad pretender seguir jugando con la realidad, que no es más que dejar que la situación de inseguridad en la República Dominicana se siga agravando.
No estamos haciendo lo que hay que hacer para frenar el auge de la delincuencia. Y haciendo bulto con este tema delicado las autoridades están perdiendo la oportunidad de hacer algo serio que marque una diferencia con el pasado.
No pretendan engañar a la población, la gente está padeciendo los efectos de la delin- cuencia y no hay más verdad que esa.
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