Las muertes por accidentes de tránsito en la República Dominicana son una tragedia que no hemos podido controlar.
Las cifras de fallecidos son alarmantes. Los lesionados, los huérfanos y los adoloridos por lo regular quedan ocultos en esa realidad desgarradora.
Más de 11,500 personas han perdido la vida en los últimos seis años por esta causa, según revela el segundo informe del Observatorio de Salud y Bienestar Social del Círculo de Cultura Democrática.
La entidad ha registrado zonas de mayor riesgo en que se producen los accidentes, así como los horarios más peligrosos.
Queda ratificado el alto porcentaje de motoristas involucrados y muertos en esos accidentes. Es una tragedia que debemos resolver.