La sesión de este miércoles de la Cámara de Diputados demostró cuán lejos estamos de lograr un frente común para enfrentar la pandemia.
Es que los honorables evidenciaron que ni siquiera entienden los principios básicos para detener la expansión del virus, dejando constancia de un lamentable despropósito.
Mientras eso ocurría en esta media isla, Francia prácticamente cerró el país y España, particularmente en Madrid, ha impuesto medidas de emergencia para evitar un rebrote masivo del COVID-19.
Sin embargo, aquí nuestros honorables diputados hablaban de permitir el tránsito con el ingenuo pensamiento de que la gente andará por la calle manteniendo el distanciamiento físico, usando mascarillas, sin hacer reuniones y bebedera de tragos en cualquier lugar, exactamente lo contrario a lo que se necesita para evitar el repunte de la pandemia.
Por Dios…si nuestros honorables legisladores piensan así, ¿qué podemos esperar de las masas, desesperadas por las restricciones que impone la COVID-19?
Ahora más que nunca es necesaria la coherencia, porque si no hay unidad en los propósitos, difícilmente ganemos la batalla.
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