Indonesia.- Hubo un resquicio de esperanza para la siete veces olímpica gimnasta Oksana Chusovitina en los Juegos Asiáticos.
La gimnasta de 43 años de Uzbekistán se llevó la plata en caballo de salto, una décima de punto detrás de la surcoreana Yeo Seo-jeong, de 16 años.
Yeo, que nació 10 años después de que Chusovitina hiciera su debut olímpico y ganara el oro en el evento por equipos en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 en Barcelona, ganó con 14.387 puntos.
Chusovitina, quien ganó la prueba de caballo de salto en los Juegos Asiáticos de 2002 y se llevó las medallas de plata en el evento en las ediciones de 1994 y 2014, compite con la intención de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020, a los que llegará con 45 años.
Oksana Chusovitina, nacida en 1975 en Bujará, ha competido durante su carrera bajo cuatro banderas. Primero para la Unión Soviética hasta su desaparición. En los Juegos de Barcelona participó con el Equipo Unificado. Como uzbeka compitió en Atlanta 1996, Sídney 2000 y Atenas 2004, como alemana en Pekín 2008 y Londres 2012 y en Río lo hizo como uzbeka.
Además de los avatares geopolíticos, hay también razones personales para tanto cambio de nacionalidad. En 1999 fue madre de un hijo, Alisher, a quien en 2002 se le diagnosticó una leucemia. La familia se trasladó a vivir a Alemania para que el niño recibiera el tratamiento adecuado. Chusovitina, que había abandonado la gimnasia tras la maternidad, se nacionalizó alemana y volvió a la competición para ganar el dinero que necesitaba.
Antes de los Juegos de Londres anunció que serían los últimos. Se hizo cargo como entrenadora de la selección uzbeka y en febrero de 2013 la FIG le autorizó un nuevo cambio de nacionalidad para que intentara volver a representar a su país en los Juegos de Río. Así lo hizo.