Redacción.- Es muy probable que en la actualidad no exista un jugador que haya pasado por un cambio más radical en cuanto a producción y en cuanto a la visión pública que existe sobre él que el jardinero de Chicago White Sox, Eloy Jiménez.
Sin haber participado en un juego de Grandes Ligas, en 2019 el equipo decidió apostar por el entonces jugador de 22 años y ofrecerle un contrato de 43 millones de dólares por seis años (con dos opciones de equipo para 2025 y 2026). El cual respondió con un año sólido a nivel ofensivo el cual mostró su capacidad, a pesar de solo jugar 122 partidos.
Llegó la campaña de la pandemia, donde tuvo un gran año en términos generales, pero desde entonces, las lesiones y la inconsistencia ofensiva han sido parte del paquete llamado Eloy Jiménez. 2022 no ha sido la excepción, luego de que el dominicano tuviese que perderse dos meses de acción por lesión, sin embargo, lo que ha hecho el dominicano, en especial durante la segunda mitad, debe llamar poderosamente la atención y es un grito silencioso que señala “Eloy está de vuelta”.
Sin hacer mucho ruido, Eloy Jiménez ha disputado 53 partidos de sus 72 del año durante la segunda mitad. Ha bateado para un impresionante promedio de .355 con un porcentaje de embasarse (OBP) de .427 y un slugging (SLG) de .601, los que se traducen en un OPS de 1.028, ha despachado 12 jonrones y remolcado 36 carreras dentro de un equipo que ha estado lidiando con la inconsistencia (y las lesiones) durante todo el año.
Desgraciadamente, quizás por la posición en la que se encuentra White Sox en este momento, el gran año de Jiménez parece estar pasando desapercibido a pesar de que sus números globales apuntan a que es un 53 por ciento mejor que el bateador promedio, de acuerdo con su OPS+ de 153 o al hecho de que en solo 72 partidos ha alcanzado 130 bases totales, más de la mitad que en su mejor año (240 en 122 partidos durante 2019).
No es la primera vez que luego de regresar de una lesión, Jiménez llega encendido. En 2021, durante sus primeros 17 partidos luego de una ruptura del músculo pectoral durante los entrenamientos primaverales, el "Big Baby" bateó para .323 con OPS de 1.000. Sin embargo, fue insostenible para él, ya que terminó bateando .216 con .626 de OPS el resto del año (32 juegos).
En esta ocasión, ha logrado mantenerse siendo productivo por un período de tiempo más prolongado, lo cual demuestra que el dominicano ha encontrado la fórmula para ser un bateador de peligro de manera constante en MLB.
Con estos números cabe preguntarse, ¿será Eloy Jiménez uno de los jardineros titulares del equipo de República Dominicana para el Clásico Mundial de Béisbol?
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