Santo Domingo.- Las pérdidas que provocó la explosión en una tubería matriz de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) en el sector Bella Vista, al sur de Santiago, superan los RD$2.0 millones tan solo en daños a efectos electrodomésticos, informaron este sábado los afectados.
La explosión de la tubería, que agotó su vida útil de más de 40 años aunque se instaló en el año 2000, hizo estallar un tramo del concreto de la calle Fernando Bermúdez en el sector Bella Vista, y parte de los cimientos de la casa donde reside el comunicador de Santiago, Guillermo Saleta, cuya familia fue abruptamente despertada con el estruendo que provocó la explosión.
La presión del agua que expulsaba la tubería de unas 30 pulgadas de longitud diametral lanzaba a varios metros piedra, arena y lodo, además de penetrar sus corrientes a la casa del comunicador, donde efectos electrodomésticos y mobiliario que había comprado para mudarse a una nueva residencia, además de los efectos en uso, se dañaron como consecuencia de la repentina inundación, que no dio tiempo a salvar más que un televisor que recientemente había comprado.
Lavadoras, secadoras, nevera, estufa, cuatro drones, celulares, y otros aparatos, muchos de última generación, se dañaron. Además de eso, la casa sufrió problemas en su estructura. El techo y paredes están agrietados, lo que impide que la casa pueda seguir siendo habitada.
“Yo perdí dos casas en una, porque se nos dañó lo que usábamos aquí y lo que habíamos comprado para irnos a otra casa”, dijo Saleta, quien dice que, si bien esos daños pudieran ser indemnizados, no hay manera en que se pueda resarcir el daño emocional que ha provocado la situación, que desde hace 2 años tiene en ascuas a la comunidad, que vive atemorizada sin saber en qué momento se producirá una nueva explosión.
Desde el pasado 18 de diciembre cuando otra explosión se produjo, dañando los cimientos de otra residencia, hasta la fecha, se han registrado cerda de 6 agrietamientos más en la misma tubería.
Saleta, pronostica que las explosiones continuarán, debido a que las averías se producen en los mismos tramos que han sido reparados, lo que evidencia un trabajo de corrección de mala calidad.
El director de Acueductos de Coraasan, Héctor Jáquez, asegura que Coraasan lamenta la situación e informó que la institución se esfuerza en sustituir, en el menor tiempo posible, la obsoleta tubería de 5 kilómetros de extensión.
“No es por negligencia que se producen las explosiones, porque es una tubería vieja de más de 40 años de uso”, responde Jáquez, informado por Diario Libre sobre las quejas de los vecinos en el sector.
Dijo que, para responder con mayor prontitud a la emergencia, se sustituirán dos tramos de la tubería, uno de estos el que está en la entrada a la planta de Coraasan en el sector Nibaje y el otro tramo en donde se han producido las últimas averías, como una medida paliativa y que conlleva menor costo, hasta que el gobierno pueda disponer de unos US$500 millones que, conforme el presupuesto levantado, la institución necesita para cambiar la tubería completa.
En los últimos meses se han producido más de 15 roturas, algunas no llegan a producir daños materiales tan altos, pero provocan incertidumbre y priva del servicio de agua potable a más de una decena de barrios del sur de la ciudad, hasta que se corrija la avería y se vuelva a llenar el tanque de redistribución de agua.
José Ureña, reside al lado de la residencia que el pasado 18 de diciembre fue parcialmente destruida por efectos de la explosión de un tramo de la tubería. En la suya, que está agrietada, al nivel que la puerta de entrada no cierra, no viven tranquilos, con temor de que la vivienda colapse sobre su familia.
Se apresura a buscar donde mudarse, mientras su esposa, sostiene que se irá otra vez fuera del país, porque allí no se vive en tranquilidad.
En la residencia del comunicador Guillermo Saleta, yacían documentos y periódicos de más de 50 años, sustento de la historia de la comunicación en la que él y su familia han sido protagonistas insignes de Santiago.