Redacción.- El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que amplió su liderato al frente del Mundial de Fórmula Uno al ganar este domingo el alocado Gran Premio de Australia, que se disputó -con tres banderas rojas- en el circuito semi-urbano de Albert Park, declaró en Melbourne que está "contento por la victoria", pero que "ha sido una carrera difícil".
"Estoy contento por mi victoria, pero ha sido una carrera difícil; no necesitábamos una carrera tan larga en resolverse. Muchos pilotos estaban confusos en cuanto a la necesidad de esa última bandera roja. Hoy ha sido un día complicado", comentó Verstappen, de 25 años, que logró su trigésima séptima victoria en la F1, la segunda de la temporada, al ganar por delante del inglés Lewis Hamilton (Mercedes) y del español Fernando Alonso (Aston Martin), que acabó tercero y -a los 41- firmó su podio número 101 en la categoría reina.
"Tuve una mala salida", explicó 'Mad Max', que arrancó desde la 'pole', acerca de la primera de las tres que se dieron -dos desde parrilla y otra desde el 'pit lane', por detrás del coche de seguridad- este domingo en Albert Park.
"No fue buena, esa primera salida. Pero luego lo que hice fue tener cuidado; porque tenía más que perder. El ritmo era 'ok'; y la primera de las dos banderas rojas del final se puede entender, pero la segunda no", explicó el nuevo ídolo deportivo de los Países Bajos, que ahora lidera el Mundial con 69 puntos, quince más que su compañero, el mexicano Sergio Pérez -quinto este domingo- y con 24 de ventaja sobre Alonso.
"Fue un auténtico descontrol, todo muy lioso al final, así que intenté mantenerme al margen de cualquier problema, y por fortuna, hemos vuelto a lograr una victoria; por lo que estoy muy contento", manifestó Verstappen después de ganar por primera vez en Australia.